La misión del Blog Buenas Nuevas

La Sana Doctrina del Señor Jesucristo a la luz

En la vida espiritual de los hijos de Dios se requiere explicar el propósito de la actividad en el servicio a nuestro Señor Jesucristo y es justo en este número en el cual guiados por el Espíritu, es conveniente definir la misión que nos lleva a compartir la palabra del Señor Jesucristo. Para mostrar la misión es necesario recapitular algunas vivencias que nos antecedió en el propósito de nuestra explicación.

La idea del blog nace después de haber incursionado en diferentes acciones para publicar el nombre del Señor Jesucristo y de la revelación que nos ha dado su espíritu en conocimientos, interpretaciones, testimonios que nos fueron orillando a compartir por medio de repartos de boletines, programa de radio, visita personal a hermanos y a congregaciones y hacer partícipes de las riquezas inescrutables por vivir el evangelio de Cristo en su vida.

El haber sido tomados por el Señor Jesús en un lugar apartado de la capital del estado en una congregación que se reunía por las casas, nos hizo respirar la misma libertad de los primeros hermanos que escribe el nuevo pacto en el cual se reunían en la sencillez y en la practicidad. Sin tener civilización y cultura del mundo, fuimos movidos en el Espíritu a leer la biblia en conjunto con los demás hermanos, todos los días, al inicio fue un poco complicado su lectura al estar saltando de capítulos del antiguo al nuevo y de ahí, surgió el acuerdo de leerla en orden, capitulo por capitulo; versículo por versículo, al inicio fue la lectura del antiguo pacto y gradualmente nos llevó a leer el nuevo pacto.

La labor del Espíritu Santo se fue enseñoreando de nuestra vida y al terminar de leer completo el nuevo pacto, adquirimos una gran cantidad de conocimientos que no habíamos disfrutado. A pesar de tener acceso a libros, audios, videos, revistas y otras formas de difusión del evangelio, nos propusimos leer el nuevo pacto y dejar todo lo que teníamos y nos concretamos a leer el nuevo pacto y a comprender el sentido espiritual de la palabra.

Si algo nos enseñó el Espíritu es el de mantener comunión con todos los hermanos que invocaban el nombre del Señor Jesús cualquiera que fuese la denominación, sin embargo, al platicar empezamos a sentir una diferente visión de la escritura en su forma de interpretar y en su mover, con la paz que nos ha enseñado el Señor Jesús, iniciamos practicar una gran tolerancia por causa de la debilidad y poca lectura del nuevo pacto. Habían transcurrido cuatro años y el amor, la fe y la esperanza se mantenía una práctica constante en la vida diaria de los hermanos.

Si algo nos había mostrado el Espíritu es que casi nadie leía el nuevo pacto, se denominaban cristianos, pertenecían a organizaciones o denominaciones sin comprender el cuerpo de Cristo, nadie mencionaba la verdad excelsa que Jesucristo es el Hijo de Dios, su preocupación por templos, diezmos, practicar cosas del mundo, enseñanzas del antiguo pacto en la vida de la iglesia, imitación a los sistemas religiosos antiguos, etc. eran muy notables, entre otros grandes yerros. Nos fueron orillando a mantener nuestra congregación en las casas, al no ver en ellas la esencia principal de sus hijos, el señorío de Jesucristo en sus vidas.

Mantuvieron muchos de ellos el mismo error que los religiosos, un error doctrinal fundamental que no puede pasar por alto en la iglesia de Jesucristo, el constituir un pastorado singular y una sujeción ciega a sus deseos mundanos, si fueran del Señor Jesús los llevarían al conocimiento de poner los ojos al Señor Jesús y no en ellos.

Qué lejos estaban de la humildad del apóstol Pablo en la práctica de ministerio, en todo el mundo esos farsantes servidores de Cristo, quieren la gloria para ellos y en su interior nunca, jamás, volverán a tener conocimientos puros por parte del Espíritu Santo.

La práctica constante de la lectura del nuevo pacto y mantenerse alejado de las corrientes de sabiduría humana, reconocer nuestras debilidades y nuestra poca fuerza, pero siempre llenos de la integridad de Cristo en nuestras vidas, nos hizo comprender más su palabra y el propósito de la iglesia y de conocer los misterios de Dios.

No hay analogía más perfecta que la utilizada por el apóstol Pablo del crecimiento espiritual con la de las diferentes etapas con las que pasa un ser humano en su vida física.

No importa la edad física de conocer el plan de salvación de Dios en la vida del creyente, puede ser de diez años, 15, 20 25 30 50 o 70 años, no importa el sexo, color, ocupación, nacionalidad, estudios, todos tenemos que ir gradualmente creciendo. Qué terrible es que una madre quiera tener con el paso de los años a su hijo en la cuna, 10 años en la cuna, 20 años en la cuna, el desarrollo es anormal. No está creciendo el hijo, eso mismo acontece en la vida espiritual de muchos creyentes, no crecen por estar atados a un sistema de enseñanza insana que los lleva a enfermar de ignorancia y atraso.

Tampoco es correr a ver ilusos y engañadores que se dicen traer enseñanza de Jesucristo o asistir a lugares concurridos o populares para decir que son muchos que los que no fueron, es triste ver su condición humana y alejarse más en las cosas del espíritu.

¿O ignoras que el Espíritu Santo mora en ti? Si fuera del mismo espíritu que dicen tener esos falsos profetas, obreros si fueran de Dios, no permitiría que se rindiese algún culto a su ego. Pero ellos no tienen el Espíritu Santo y tú que corres al error. Déjame decirte has menguado el espíritu por ir en la carne a tu loco desvarío.

Persistimos más de veinte años en la lectura constante del nuevo pacto, nos dispusimos dar a conocer las buenas nuevas que ofrece el evangelio de Jesucristo y fuimos desechados, por que ellos prefieren la lectura del antiguo pacto, ya no solo no veíamos a los religiosos que salieran de sus sistemas, ahora veíamos en las congregaciones un rechazo total o parcial de las enseñanzas del Señor Jesucristo, esto es duro de creer, pero es una realidad en nuestro tiempo.

Nos dispusimos en el Espíritu muchos hermanos en profesar nuestra vocación y profesión en Cristo Jesús en los siguientes diez años en proclamar que Jesucristo es el Hijo de Dios; que el único y sabio Dios (Dios de amor y misericordia) es nuestro Padre y que el valor de la sangre derramada en su muerte y su muerte en la cruz perdonó todo, es el sacrificio que nos une a la máxima voluntad con nuestro Padre.

Nuestra dirección estaba con el inconverso, con el que dice que no conoce a Dios, con el religioso católico romano que de corazón busca al Señor Jesucristo, la mayoría de los hermanos que escribimos en el blog nacimos en ese sistema religioso y amábamos nuestra religión hasta que llegó el momento de tener luz y ver el error en el cual estábamos.

Pero con el paso de los años veíamos la gran tendencia de los creyentes que habían salido de su religión, de su ateísmo, de sus adicciones, de sus debilidades y se dirigían al judaísmo y al seguimiento de líderes falsos que desean vivir de ellos.

También vimos hermanos como nosotros que habían salido del sistema denominacional y deseaban el alimento solido espiritual y la comunión con los demás hermanos en un amor fraternal de Jesucristo en nuestras vidas.

Todo esto lo observamos en los evangelios de como las multitudes seguían a ver a Jesucristo, los había unos por curiosidad, otros por necesidad, algunos por oír su palabra, otros para echarle mano, otros para confiar su ministerio inclusive otros que seguían a otros. Y él estaba presto para enseñar, predicar y sanar enfermos.

En nuestra humilde labor los temas aquí impartidos es para toda clase de lector, el Espíritu nos ha llevado desde nuestra aparición en este medio a proclamar que Jesucristo es el Hijo de Dios, como primer escalón de la gran escalera en la comunión con nuestro Padre, a la lectura del nuevo pacto para que sigas la enseñanza de nuestro Salvador y a permanecer en el Espíritu para discernir el propósito de Dios en tu vida y así ser recipiente de todo el caudal conocimiento y sabiduría que tiene nuestro Padre por retener en tu vida la verdad de Jesucristo es el Hijo de Dios.

No tenemos otro interés más el que nuestro lector seas salvo para la eternidad, una salvación que tendrás y disfrutaras, no nos lleva más que al gozo de que tú y tu familia, amigos y familiares, vecinos y compañeros vean la maravillosa vida de Jesucristo en tu vida.

Una vida que no tiene nada que ver con el mundo exterior sino con la vida interior en tu mente y corazón, en silencio y reflexión, en quietud y reposo, en movimiento e inteligencia, en poder y amor, en perdón y sabiduría, en paz y en gozo, en palabra y comunión. En pocas palabras disfrutar las riquezas inescrutables que tiene el Señor Jesús para ti.

Quizá una rareza en este mundo, es no participar de los nombres de los colaboradores que trabajamos en este blog, pero en los intereses del reino espiritual es participar gratuitamente con los misterios que te ha otorgado y de proclamar al excelso que está como cabeza y como gran pastor, el Señor Jesucristo, reconociendo que somos humildes vasos en hacer partícipes de las revelaciones de su palabra a nuestros lectores.

Cada uno de los temas expuestos obedece a una consagración espiritual de obediencia a las promesas de Jesucristo primeramente eran tres temas y luego reducimos a dos para tener tiempo de meditarlos, siempre hasta el fin de nuestros días, exhortaremos a leer en orden el nuevo pacto, dentro del proceso enseñanza y aprendizaje humano y espiritual le corresponde al orden el mejor método de enseñanza.

Jesucristo vino a su pueblo y luego al pueblo gentil.

Nació, vivió, dio testimonio e inició su ministerio, murió en la cruz, resucitó y está sentado a la diestra del Padre y vendrá por su iglesia.

En un orden y en un orden están hechos los tiempos.

Así nace hace casi dos años este blog, para proclamar el evangelio de Jesucristo, sin leudas, ni contaminaciones, dándole una frescura a las revelación en el Espíritu, se encuentra dirigido a todos sin excepción, nos hacemos igual a los iguales y diferente a los diferentes.

Nuestra enseñanza procede del maestro Señor Jesucristo, la salvación de nuestro Señor Jesucristo, el poder del Señor Jesús, el amor de Cristo, el discipulado del príncipe de los pastores, los pensamientos espirituales de nuestra cabeza el Señor Jesús, la vida del autor de nuestras vidas, la fe de nuestro Padre, el pan de cada día de nuestro Padre, toda cobertura del Obispo de nuestras almas, toda imitación del Cordero de Dios Jesucristo.

Así hemos sido enseñados y así transmitimos nuestra enseñanza, ayúdanos en el Espíritu a propagar el evangelio de la vida y de la luz para todos aquellos que convivan en nuestro entorno.

Al Príncipe de Paz sea nuestra vida en agradable sacrificio. Amén.