La imposición de manos constituye un ejercicio espiritual de transmitir el poder de Dios según te lo haya revelado el Espíritu Santo a ciertas personas y en circunstancias en el cual sirva el testimonio para los que ven la manifestación de dominio y soberanía que ejercen los hijos y los siervos de Dios con esta prueba de amor y seguridad de que el Espíritu de Dios mora en ellos, como está escrito en Hechos 18:18 Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero,
Algunos se han preguntado qué significado tiene la imposición de manos, siendo que éstas son utilizadas diariamente en el trabajo y se ocupan en otros menesteres, y si al estar usándolas en estos afanes ¿se estará desperdiciando dicho poder en cosas cotidianas? Este tipo de razonamiento es acorde a la mente humana no ve más de lo que sus ojos le alcanzan y por ende no entienden, ni comprenden las cosas de Dios. Las cosas del Espíritu se deben comprender en que el Espíritu Santo vive en nuestro interior, al creer en Jesucristo, tu recibes el Espíritu del Señor, tu corazón aloja al Señor y él te conducirá y guiará a los asuntos del reino de Dios; si te propones dejar de vivir lo que hacías antes, entonces la guianza te afirmará cada vez más en el Espíritu y el reino de Dios estará en ti.
La presencia es real internamente, el Espíritu Santo se domicilia en tu ser, ¿habrá cosa mortífera que te haga daño? No la hay. El Espíritu es una fuerza extremadamente poderosa que servirá para proteger tu seguridad, el problema es la carne y el alma que reacciona en forma inmediata a los acontecimientos externos si nos descuidamos en nuestra vida espiritual, dejando menguar el poder que está en ti, al deleitarnos en la carne o en las voluptuosidades de nuestra alma por tales circunstancias mengua el poder que hay en el cuerpo. De ahí la importancia de obedecer la instrucción de vivir en el Espíritu, a fin de que él obre, opere, guie en favor de nosotros mismos. La carne, el corazón y la mente alojan desde el más mísero pensamiento hasta el más terrible de maldad. No importa condición humana, género, posición, edad, ciudadanía el hombre está perdido en el mundo, no hay salvación por él mismo.
El Señor Jesucristo vino hacer una obra muy poderosa en el hombre: venir al corazón para ir desbaratando y arreglando nuestra carne y mente e ir destruyendo los deseos de nuestra alma y construyendo los anhelos de vivir y seguir al Espíritu Santo, obras y acciones que dispuso el Padre en la vida de sus hijos. Una de ellas es manifestar su poder a través de la imposición de manos en Mateo 19:13 Entonces le fueron presentados unos niños, para que pusiese las manos sobre ellos, y orase; y los discípulos les reprendieron. Todos en forma responsable deben de acercar a los niños a las enseñanzas de Jesucristo (ver blog número diez) será de mucha utilidad para crecer desde temprano en la sabiduría de Dios.
El Señor Jesucristo prometió a todos sus seguidores siervos u ovejas de su rebaño el imponer manos para sanar a los enfermos, muchos que no andan en el Espíritu, sino que andan en religiosidad se les hace difícil comprender estas promesas en la vida de los creyentes y han pregonado que los versículos que siguen son agregados y no son promesas reales. Así es el engaño que el diablo ha puesto en sus mentes, esto es una realidad plena si vives en el Espíritu y dejas de vivir en preceptos morales y éticos en lugar de practicar la libertad y santidad de nuestro Señor Jesucristo. Está escrito y fue dicho por el Señor en Marcos 16:18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán. Si no crees en estas promesas, no vive el Señor Jesús en ti y no has creído en él, sino que vives una práctica religiosa humana alejada de Dios.
El libro de hechos de los apóstoles es la vida operativa de la iglesia, el Espíritu Santo se ha encargado que se mantenga en los cánones de la escritura para enseñar a los creyentes de las posteriores generaciones como está escrito en los siguientes versículos Hechos 6:6 a los cuales presentaron ante los apóstoles, quienes, orando, les impusieron las manos
Hechos 13:3 Entonces, habiendo ayunado y orado, les impusieron las manos y los despidieron.
Hechos 9:12 y ha visto en visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima para que recobre la vista.
Hechos 28:8 Y aconteció que el padre de Publio estaba en cama, enfermo de fiebre y de disentería; y entró Pablo a verle, y después de haber orado, le impuso las manos, y le sanó.
Es de suma importancia resaltar que en estos tiempos en la iglesia ha dejado de funcionar el presbiterio y en el cual se alberga a los ancianos para difundir los ministerios y sanidades en la grey como está escrito en 1 Timoteo 4:14 No descuides el don que hay en ti, que te fue dado mediante profecía con la imposición de las manos del presbiterio.
No hay que imponer las manos con ligereza, hay que hacerlo conforme el Espíritu. El anhelo de nuestro Padre es que sus hijos den testimonio de su poder en los hombres de este mundo, las ovejas y los siervos del Señor Jesucristo deben estar prestos en guardarse de contaminaciones del mundo y vivir una vida física plena en la libertad y santificarse cada vez más a través de la lectura del nuevo pacto, a fin de estar listos para toda buena obra siendo una de ellas la imposición de manos. Amén.