El inicio de la iglesia de Cristo fue un hecho lleno de actos espirituales que asombraron al mundo de antes y sigue asombrando al mundo actual, no tan solo fue la nueva doctrina del conocimiento del Señor Jesucristo, sino fue la gran manifestación de prodigios, señales y milagros que surgieron en la predicación de la palabra del Señor Jesucristo que engrandecieron en los albores de la iglesia las primicias del poder de Dios en la vida de los primeros santos que vieron las maravillas que Padre les tenía preparadas desde antes de la fundación del mundo para hacer frente a la vida ardua en este mundo.
El plan de la fundación de la iglesia en su creación es un acto de la más profunda demostración de amor que tiene para sus criaturas que ahora adopta como hijos y expresa su sabiduría en congregarlos en un cuerpo espiritual lleno de su Espíritu. Pentecostés, es otro parteaguas de los tiempos definidos en el cual el nombre de su Hijo Jesucristo y su palabra va a dar un giro a las nuevas formas de conocer la voluntad de Dios, el Padre, ya no hay otro nombre que las futuras generaciones de los hombres puedan mencionar para conocer la reconciliación con Dios. JESUCRISTO lo llena todo ya no hay que mirar atrás, la religión judaica ha caducado, no tiene vigencia, ahora el antiguo testamento es una sombra que acompaña al cuerpo del nuevo pacto que es el que rige y tendrá vigencia hasta que el Señor disponga.
El Espíritu Santo es el encargado de mover y hacer llegar a la iglesia el nuevo orden en Jesucristo y no tan solo con palabras que te llevan a la sabiduría e inteligencia completa sino con poder para manifestar los nuevos tiempos que se avecinan y que el enemigo de Dios no va a dejarse derrotar tan fácilmente; si conociendo la divinidad del Hijo, lo tentó, cuánto más no hará en los que creyeren en el Señor Jesús, de ahí la importancia de haber recibido el Espíritu Santo los primeros discípulos porque en ese inicio victorioso ha sido transmitido el mensaje de salvación con poder de lo alto ante los lugares más alejados de la tierra.
Los hechos maravillosos de poder y milagros por Jesucristo en su ministerio han sido de gran enseñanza para los miembros de su iglesia de todas las edades históricas en el transcurso de su vida por este mundo, está profetizado que mayores cosas habrán de hacer sus seguidores congregados con el nombre de su poder majestuoso y portentoso que hace recordar aquellas palabras de victoria y seguridad escritas por el apóstol Pablo para consolación y ánimo de los nuevos creyentes “si Dios con nosotros ¿Quién contra nosotros?”. El verdadero poder radica en la renunciación de tu alma, en no poner los ojos al mundo, en poner la vista en el Señor Jesucristo, en oír y leer su palabra, en vivir en el Espíritu y cumplir los mandamientos del Señor Jesucristo y las demás que se pueden leer en el nuevo testamento, los milagros serán un efecto de llevar la vida en Cristo, una cosa común y no de asombrarse porque tenemos el Espíritu Santo de Dios y el Hijo intercede ante el Padre y el Padre de toda consolación ve en nosotros que obedecemos su mandamiento de seguir a Jesucristo.
Si hoy no hay esos milagros en el lugar donde te congregas, vuélvete a la palabra del Señor Jesucristo y experimentarás su poder en ti para el servicio de la iglesia y demostración a los del mundo. En el libro Hechos de los apóstoles 3:1-9 está escrito: 1 Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración. 2 Y era traído un hombre cojo de nacimiento, a quien ponían cada día a la puerta del templo que se llama la Hermosa, para que pidiese limosna de los que entraban en el templo. 3 Este, cuando vio a Pedro y a Juan que iban a entrar en el templo, les rogaba que le diesen limosna. 4 Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos. 5 Entonces él les estuvo atento, esperando recibir de ellos algo. 6 Más Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. 7 Y tomándole por la mano derecha le levantó; y al momento se le afirmaron los pies y tobillos; 8 y saltando, se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando, y alabando a Dios. 9 Y todo el pueblo le vio andar y alabar a Dios.
El poder del amor del apóstol Pedro es un hecho que debe de poner a reflexionar a más de uno de los actuales hermanos en el servicio de la iglesia:
Primero: el cojo no pidió la sanación.
Segundo: el apóstol Pedro le ordena que lo mire, una vez obedecido le responde con unas palabras que hoy día, no se entienden ya que se han vuelto materialista y si no hay dinero, como que no está claro el asunto.
Tercero: al final en el nombre de Jesucristo le ordena levantarse y caminar;
Cuarto: el cojo se levanta, salta y alaba a Dios (aquí si se justificaría alguna danza para el Señor). El amor de servir debe estar presente en los que obran en el Señor.
En el mismo libro de Hechos 4:29-31 29 Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, 30 mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. 31 Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios. Los milagros se suscitaron en las primicias de la vida de la iglesia, porqué no ahora también, ¿acaso ha menguado el poder de Dios? ¿O será que el haberse apartado de la palabra del Señor Jesucristo ha contristado al Espíritu Santo de Dios y por tal situación, no se manifiesta su poder? Sinceramente éste ha sido el motivo principal que en muchas congregaciones se han apartado de la palabra del Señor Jesucristo y sus promesas por motivo de volverse al antiguo pacto u otras enseñanzas llenas de materialismo y apego al mundo.
Se lee en Hechos 5:14-16 14 Y los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de mujeres; 15 tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y lechos, para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos. 16 Y aun de las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos y atormentados de espíritus inmundos; y todos eran sanados.
El Señor Jesucristo es fiel a su palabra y al enviarnos al Espíritu Santo se confirma ese gran poder para acompañarnos en esta vida y hasta el arrebatamiento de la iglesia el Espíritu mora en nosotros y en la vida de la iglesia se manifestará si estamos profesando la verdad de Jesucristo. Amigo lector: Creer que Jesucristo es el Hijo de Dios es el nuevo inicio a conocer la más grande verdad revelada para ti a fin de que te hagas participe de todas las promesas que el Señor ha preparado para ti.
En el capítulo de Hechos 19:11-12 11 Y hacía Dios milagros extraordinarios por mano de Pablo, 12 de tal manera que aún se llevaban a los enfermos los paños o delantales de su cuerpo, y las enfermedades se iban de ellos, y los espíritus malos salían. Se repite las grandes manifestaciones de poder del Espíritu Santo en manos del siervo que dejó todo y siguió el camino: Jesucristo. En 2 Corintios12:12 Con todo, las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, por señales, prodigios y milagros. Escribió a los corintios que fue investido como apóstol con poder para evangelizar y llevar la palabra del Señor Jesucristo y da una característica principal de los apóstoles las señales, prodigios y milagros que deben acompañarlos, sino hay estas señales, la misma palabra los excluye del ministerio pretendido (durante el mes de enero hablaremos del ministerio de los apóstoles).
El Señor Jesús ha establecido los ministerios en su iglesia y los dones los repartirá libremente el Espíritu Santo, uno de ellos es que algunos hermanos se les concederá hacer milagros como está escrito en 1 Corintios 12:10 A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas. Este ministerio o don no es para deleite de quien lo posee sino para repartirlo en amor y misericordia para que sea glorificado el nombre del Señor Jesucristo y no el de los hermanos.
Se está muy lejos de dar un buen testimonio en la iglesia respecto al poder en nosotros, vuélvanse al Señor Jesús y esto se convertirá en una realidad espiritual de todos los días como esta está escrito en Hebreos 2:4 testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad.
Hermanos que han creído en el Señor Jesucristo como su Salvador: No nos cansaremos de exhortarlos a creer en Jesucristo como Hijo de Dios (leer el blog 2 Jesucristo es el Hijo de Dios) por las diversas promesas que acompañan en creer y confesarlo. Así nace todo: sigan leyendo la operatividad de la iglesia en orden capitulo por capitulo; versículo por versículo y podrán vivir de estas manifestaciones del Señor para ayuda de los que te rodean. En alguna ocasión los discípulos del Señor venían gozosos a su encuentro cuando estaba en el mundo físico porque querían comunicarle la gran cantidad de milagros que se habían realizado en su nombre, el Señor Jesús les dijo: “gozaos porque sus nombres estén inscritos en el libro de la vida eterna”, AMÉN.