Un niño cimentado en la palabra de fe del Señor Jesucristo y que se aferra a esa verdad, difícilmente se volverá atrás de su fe; en su vida participará en libertad en las cosas del mundo o conocerá su naturaleza caída y sabrá reconocer los ataques del enemigo de Dios y que lo engañará, aunque después de todo ello, lo superará. Al Señor Jesús le gusta la libertad en los jóvenes, sabe de los mandamientos humanos que se imponen como una carga molesta para vivir la vida plena espiritual, Él fue joven conoce la naturaleza carnal de la juventud ¿Quién lo podrá engañar? Él fue un ejemplo de renunciación, de estar sujeto a sus padres, de crecer en sabiduría, de esperar su tiempo, de dar testimonio con los demás, de humildad, de mansedumbre, de testimonio, de trabajo, estos modelos son los que deberá imitarse en la juventud para tener una vida plena madura en el conocimiento de Jesucristo.
Un joven tiene que conocer lo que Dios le ha otorgado para este mundo y de los dones que le ha sido dado para su reino espiritual, la esencia de su ser la debe reconocer fielmente sin subestimarse ni sobrestimarse en un perfecto equilibrio de sabiduría para lo que fue preparado, nadie nace fuera de época, el tiempo y lugar son los propicios para desenvolverse. Un principio de sabiduría que debe de acopiarse es que Dios lo constituyó con todo, así como tal es en su vida, la vanidad es una consecuencia de la juventud y hay que desecharla, así se inicia en el camino de la renunciación.
En una labor de vida espiritual los padres contribuyen mucho al futuro de sus hijos al solicitarle al Padre por medio de nuestro Señor Jesucristo la mejor vida para el testimonio y servicio de sus hijos. Los padres durante la gestación, alumbramiento y crecimiento del niño o niña están condicionados a que diariamente los pongan en el cuidado del Padre, el profetizarlo conjuntamente con los hermanos y en la vida de la iglesia es labor de continuidad del cuerpo de Jesucristo, esto es, que la obediencia a la palabra será transmitida de generación en generación y formará parte del reino en su vida.
Los jóvenes en Cristo deben preparase para su futura vida, son responsables de ellos mismos y al sujetarse y obedecer a sus padres se hacen de una promesa espiritual dada por señal a todo el mundo le ira bien y tendrá larga vida. Los oficios y profesiones de los jóvenes deben ser también puestos en el nombre del poderoso del Señor Jesucristo los ayudará a valerse por sí mismos y serán de gran testimonio de que en los lugares que trabajan serán bendecidos los que ahí laboran y la empresa será colmada de beneficios. No temerán de ningún mal, saldrán adelante de cualquier reto y no habrá obra o labor que no la puedan realizar, saben que tiene el Espíritu Santo de Dios y los guiará a toda victoria.
Los jóvenes en Cristo inician cualquier actividad en el nombre del Señor Jesucristo, por muy competentes y sabios que sean en lo que hacen, se encomiendan al que tiene todo el poder en el universo y Él es quien da la victoria. Reconocen que son luz del mundo y sal de la tierra, los que los rodean se admirarán que algo o alguna fuerza extraña los hace vencer en todo y son testimonios vivos de que Jesucristo está en ellos. Cuidan de su hablar, de su andar, de su relación con los demás, ganarse el pan de cada día con el esfuerzo de que Jesucristo está en sus vidas es el logro final de su vida.
Los jóvenes en Cristo son entendidos que en sus vidas serán atacados, vituperados, amenazados, así se carga la cruz, no se debe pagar mal por mal, antes debemos de vencer al mal con el bien, así está escrito en Romanos. La familia debe tomar las providencias necesarias para orar por los enemigos de ellos mismos y de los jóvenes. Ser de Jesucristo en un mundo concesionado al enemigo no es fácil, recuerda que el Espíritu Santo que mora en ti te va enseñar a echar mano de la armadura espiritual. Perdonad siempre todo agravio, esto sentirás que proviene de Dios y que reina en ti, el reino de Dios es que el Padre y el Señor Jesucristo reinen en tu corazón.
Los jóvenes en Cristo están preparados para toda obra espiritual con mayor razón para las obras terrenales estas provisto de mente ágil, despierta, intuitiva y de un corazón abundante en amor, esperanza y fe, de un espíritu que todo lo sabe, si Dios contigo quien contra ti, no temas el amor de Dios se ha derramado en ti, (conoce todas las promesas que Dios te ha dado para ti en cuatro blogs anteriores de este tema) eres victorioso en todo lo que hagas, comprende que debes estudiar, prepararte, capacitarte, adiestrarte, actualizarte, innovar, ser diligentes para guiar y orientar, si estas bajo el mando de otro obedece, no cuestiones, aun cuando tengas la razón, obedece; si es mucha tarea o labor hazla, un gran poder te hará hacerla, si te piden que te quedes más tiempo, eso y más complácelos al final veras la conveniencia de haberte quedado. El enemigo es astuto y quiere que desistas de seguir a Jesucristo, pero en ti está que lo venzas y huya de ti derrotado.
Los jóvenes en Cristo están preparados para huir de las pasiones juveniles, resiste la tentación: esto viene de lo alto y viene de mucho atrás son pruebas, véncelas, estás hecho para vencerlas, cuando el Señor te formó desde antes de la fundación del mundo hizo en ti la prueba y la solución. Él ya preparó tu victoria, con este conocimiento dispones de una gran ventaja sobre todos ya sabes el fin de las cosas, Él hace cosas increíbles y maravillosas en nuestras vidas, Él es el que Es y todo está bajo su control y su poder, pero es necesario que lo conozcas más, que vivas más su palabra. Aun cuando falles Él está contigo, te consuela y te alienta en todo asunto.
Los jóvenes en Cristo forman parte de la iglesia de Cristo, leen el nuevo pacto en orden, así les enseñaron en las escuelas o colegios del mundo a leer sus materias en orden, porque si son hijos del Dios que creó los cielos y la tierra en un orden preciso ¿porque hacer la lectura de su palabra en desorden? Están sujetos al cuerpo de pastores (nunca a uno en singular), se congregan en el nombre del Señor Jesucristo en libertad y santidad de su espíritu, ayudan a los miembros de la iglesia, participan en las enseñanzas con sus maestros (en la iglesia), sujetos a sus padres, reconocen que la reunión es para edificarse conocer la palabra del Señor, oran en todo momento y en todo lugar, dan testimonio ante los que lo rodean que Jesucristo es su Señor. Se divierten con alegría sana, viajan y conocen lugares y hermanos, viven por fe, están prestos para ayudar, a ser útiles, a servir y a cumplir con sus encomiendas, apoyan en los bautismos de nuevos creyentes, ayudan y apoyan para la celebración del Señor Jesús, si son prosperados ofrendan a los santos y todas las demás que enuncia el nuevo pacto.
Los jóvenes en Cristo ponen su vista en las cosas de arriba y trabajan en las cosas de abajo, no hay que dejar de hacer lo secular hasta el día de tu ministerio, mientras persiste en el trabajo diario, o estudio, o cuidado de tu negocio o empresa, ya sabes que de ahí ejercerás tu ministerio, de tu oficio, profesión, estudio, o negocio. Dios ha preparado todo, no te muevas antes de tiempo espera su llamado, puede ser por profecía, por la voz interior que está en ti, por llamado directo de nuestro Señor Jesús, o por un siervo de Dios, si pasa tu juventud y no llega no te contristes, en tu edad adulta llegará, sino llega en esta etapa, en tu etapa senil se podrá manifestar, sino llegase y estas avisado de tu partida de esta vida tu ministerio ha sido un gran y honroso testimonio de ser de los hijos de Dios en la fe del Señor Jesucristo y alguno de tus descendientes habrá el Señor preparado para su servicio, Él te lo comunicará antes de que partas.
La visión de los jóvenes en Cristo consiste en ver cumplidas las promesas de nuestro Señor Jesucristo en la vida de los miembros de la iglesia y de los nuevos creyentes, verán acontecimientos en diferentes lugares de congregación de los hermanos fieles al Señor y en tiempos postreros de hechos en que se desenvolverá la iglesia de Cristo. Con responsabilidad y sobriedad serán saciados en los grandes acontecimientos que Dios ha preparado para su iglesia en la localidad en que se encuentran y en otras partes del orbe y podrán atisbar muchos sucesos más que acontecerán en el reino espiritual para contentamiento y gozo de los hermanos que escuchen y crean sus visiones. Amén.