Muchos hombres han fracasado al tratar de buscar y conocer a Dios, porque su único fin es demostrar que el hombre no necesita de Él, siempre están dispuestos a demostrar a través de los tiempos que desobedecer sus mandamientos y alejarse de su verdad es lo mejor para la humanidad y han inventado religiones, filosofías y teologías para lograr su objetivo.
Sus estudios y largas disertaciones carecen de validez ya que ellos en sus desvaríos y extravíos con la palabra de Dios, tratan de confundir primero a los que comulgan con ellos en sus pensamientos y razonamientos, segundo a los que no les interesa saber nada y tercero a los que son engañados para seguir ese juego peligroso y se adhieren a su postura. Los demás son sus hijos que no alcanzan a discernir la verdad ante tanta información falsa, mentirosa y engañosa que se produce por tratar a darlo a conocer y lo describen en una forma absurda y fuera totalmente de sus enseñanzas.
Utilizan sus herejías e hipocresías para corromper la verdad del único y sabio Dios Creador de los cielos y la tierra, su labor destructiva produce gran cantidad de conocimientos a través de mandamientos humanos, fundamentos intelectuales y perversas maquinaciones. Son imitadores de sabiduría y falsos conocimientos, son simuladores de seguirlo y se vuelve inútil su acercamiento a Dios, ya que Él conoce las intenciones de su corazón, porque su único propósito es que no crean, no oigan, no vean que Él está más cerca del hombre que cualquier cosa.
Ignoran que es Dios el que escoge, el que llama, el que prepara, el que capacita, el que ama y forma, sabe quiénes somos sus hijos, nos conoce por nuestro nombre, por nuestro ministerio, por obedecerlo, por seguir el testimonio de su Hijo y también quiénes son los que están con el enemigo. La iglesia de Cristo es obediente a su palabra escrita en la Biblia y sabe vivir su tiempo: el nuevo pacto, reconoce las buenas nuevas (evangelio) del Señor Jesucristo su mediador con el Padre de amor y misericordia y hemos disfrutado de su sana doctrina y sabemos que debe estar a la luz.
Hoy hacemos un llamado a todos los que lean este blog vuélvanse al Señor Jesús, sean obedientes a su palabra, crean en su corazón que Jesucristo es el Hijo de Dios, bautícense en el nombre que ha sido dado a toda la creación Jesucristo, declaren que son hijos de Dios por la fe en el Señor Jesucristo, congréguense en su nombre y vivan plenamente una vida de fe, esperanza y amor llena de paz, poder, milagros, de servicios a los santos y lo mejor de todo de experimentar la eternidad con Él en este mundo. Amén.
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En la paz del Señor Jesús, Los autores.
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